La tecnología se encuentra por todos lados y empieza a integrarse parte de nuestra cultura pero aun no es complicado encontrar las tecnologías en el aula. Nos afecta en nuestra vida diaria, en los juegos, en el trabajo, y por supuesto, en la forma de enseñar y aprender.
Integrar la tecnología en el aula de una forma efectiva está suponiendo un problema a muchos centros, que bien por falta de apoyo o por falta de medios, no llegan a dar con una solución efectiva donde llegar a un equilibrio en la integración de nuevas tecnologías con un proyecto educativo adecuado.
A todo esto, se junta que el sistema educativo actual se está poniendo en entredicho por no haber afrontado ningún cambio sustancial desde hace décadas, siendo otra realidad, que la educación en las escuelas debería basarse más en fomentar la imaginación, la creatividad, el trabajo en equipo, más que en aprender por aprender, con un rol del profesor como único poseedor de la verdad y con un libro que no es flexible en los contenidos para adaptarlos al ritmo de la clase.
Seguimos con un tipo de enseñanza donde solo niños y niñas que siguen el camino marcado son los que pueden superar los exámenes y terminar el ciclo, perdiendo por el camino grandes potenciales que o bien necesitan otro tipo de motivación o otro tipo de contenidos. Como decía Einstein, «si juzgas a un pez por su habilidad de escalar un árbol, vivirá su vida entera creyendo que es estúpido».
10 razones por las que integrar las nuevas tecnologías en el aula
- Con contenidos y metodología adecuada, los móviles, portátiles o tablets, ayudan a educar a los estudiantes de una forma más dinámica y abierta.
- Fomenta la integración de los nuevas formas de aprendizaje, abiertos para adaptarse a un mayor número de alumnos, favoreciendo un aprendizaje individualizado.
- Entorno ideal para trabajar en equipo, sin limitar la presencia física de los grupos de trabajo.
- Usar la tecnología en el aula, permite a los profesores educar a los alumnos en el uso responsable de los dispositivos fuera de un entorno controlado, como es en casa o fuera de ella.
- Los alumnos están habituados a usar tablets, móviles u ordenadores prácticamente desde que nacieron tanto para jugar como para aprender. Por eso, es lógico que se incluyan en el aula como herramienta de aprendizaje.
- La información que reciben los alumnos está más actualizada y se puede adaptar a los objetivos marcados por el centro y profesorado.
- Se cambia el rol del profesor, y los alumnos pasan a ser protagonistas de su propio aprendizaje, permitiendo una gamificación del aula que está demostrada ser ideal en un entorno educativo.
- Al tratarse de dispositivos caros obliga al estudiante a ser responsable con el material de trabajo.
- Son pocos los entornos de trabajo donde no es imprescindible el uso de las nuevas tecnologías.
- La tecnología permite a los estudiantes ser más creativos y estar más conectados.
El futuro de la educación ya está aquí, y se están perdiendo oportunidades para reorientar la educación actual hacia el mundo real en que vivimos, y en el que los alumnos van a tener que afrontar su futuro.
5 claves fundamentales para conseguir integrar las nuevas tecnologías en el aula
- La formación e implicación del profesorado es básico para la educación. Los profesores deben entender bien cuales son los objetivos y romper las rutinas que llevan años enseñando. Aceptar que pierden la seguridad de los libros, y afrontar que los alumnos pueden llegar a tener conocimientos que ellos mismos no tienen.
- Adaptar al centro de estructuras eficientes para el uso adecuado de las tecnologías. Es complicado disponer de un personal cualificado que pueda gestionar toda la infraestructura del centro de forma exclusiva, por eso, es recomendable delegar esta responsabilidad en empresas especializadas en el sector educativo.
- Romper con la seguridad de los libros debe ser sustituido por una metodología clara, donde los niños no se sientan perdidos y donde los padres puedan tener una orientación de los objetivos y ruta de trabajo. Para conseguir este punto, existen multitud de plataformas, muchas de ellas gratuitas para los centros educativos. Las principales son Google y Microsoft, aunque Apple también tiene un programa de integrar las tablets en el aula aunque normalmente esta siendo utilizada para sustituir los libros físicos por libros digitales, por lo que, aunque se integran dispositivos electrónicos (demasiado caro para el uso en centros públicos).
- Los contenidos también deben estar claros y es un error sustituir los contenidos de los libros, que han sido estructurados y orientados para conseguir unos objetivos pedagógicos adaptados para cada edad, por unos pdfs normalmente obtenidos de internet y que su calidad muchas veces brilla por su ausencia. Intentar que el centro sea el creador de nuevos contenidos es impensable, tanto por medios como por tiempo, y al igual que existen editoriales que ofrecen el contenido educativo, existen alternativas y empresas, muy comprometidas con la integración de las nuevas tecnologías en el aula de una forma eficiente y responsable.
- Contenido manipulativo. Trabajar con las manos es fundamental en el desarrollo evolutivo a cualquier edad, y conseguimos que el alumno participe de una forma activa y experimente con construcciones y actividades especialmente diseñadas para desarrollar unas habilidades y competencias. En este sentido, el material de LEGO Education tiene pocos rivales en todo el recorrido educativo desde infantil hasta secundaria.
Metodologías como el Aprendizaje Basado en Proyectos, las 4C’s (Conectar, Construir, Contemplar y Continuar) de LEGO, y otras como la clase invertida o la gamificación, están más que comprobada su beneficio en el aula.
Y tu colegio, ¿Por qué no lo integra?
Recuerda el artículo que ya escribimos hace casi dos años sobre este asunto… y las cosas no han cambiado mucho. Ahora te lo ponemos más fácil: desde 20€ por niño al año, integra un proyecto transversal utilizando la robótica, la programación y la impresión 3D.